Las ventas B2B son intercambios comerciales que suceden entre dos empresas, es decir, cuando un negocio vende su producto o servicio a otro negocio. De ahí el origen de su nombre en inglés Business to Business, que en español significa "de empresa para empresa".
Inicia el proceso de ventas B2B con una investigación de mercado de alto nivel para comprender el estado actual de la demanda de tu producto o servicio.
Date tiempo para identificar cuáles empresas encajan en tu Buyer Persona.
Reconocimiento: el comprador se da cuenta de que tiene un problema o un punto de dolor que necesita resolver.
Consideración: el comprador determina cómo podría resolver el problema e investiga productos y ofertas que pueden ayudarlo.
Decisión: el comprador compara las opciones disponibles y decide qué acción tomar.
No todos los que demuestren interés en tu oferta se convertirán en leads calificados. Para determinar si un prospecto B2B está calificado para ventas.
Si identificamos las necesidades del cliente y tus productos o servicios están alineados, intenta comunicarte directamente tanto como sea posible.
Si el resultado final no es una venta, agradece al prospecto por su tiempo y ofrécele estar en contacto para apoyarlo en cualquier necesidad que tenga en el futuro. Muchas veces un «no» es solamente un «ahora no» y habrás ganado perspectivas valiosas que te ayudarán en ventas futuras.
Si mides de manera regular y te esfuerzas en mejorar los resultados de las métricas de ventas B2B de tu organización, tú y tu equipo pueden optimizar la productividad y el desempeño en general. Las métricas clave que los equipos de ventas B2B deben dar seguimiento.
No cometas el terrible error de ofrecer una sola opción en tu propuesta a los prospectos B2B. Si lo haces, es mucho más probable que los responsables de las decisiones busquen otras opciones, mejores precios y servicios diferentes en otro lado
A las empresas rentables y exitosas no les interesan tus precios. De hecho, solo les interesa el valor que les proporcionas y los resultados que les ayudarás a obtener. Si bajas los precios cuando realizas ventas empresariales, solo atraerás prospectos que no pueden permitirse invertir en soluciones.
La respuesta es simple: cierra la venta directamente. Haz lo que sea necesario para tener un encuentro directo con los responsables de las decisiones en todas las empresas con las que quieras negociar