A los profesionales del marketing y las ventas siempre nos preguntan ¿Qué es el storytelling?
¿Para que es, en que nos beneficia, si es que la creación y construcción de historias sirve para construir marcas o simplemente es parte de una estrategia de comunicación?
Créanme que después de investigar sobre el caso, mi opinión es que si hablamos de storytelling para vender, para construir marca, para conectar con las personas, estamos hablando de una planificación para las historias.
Como ejemplo real, cuándo una persona quiere atraer la atención de otra, cuenta una historia que haya vivido, es decir ya tenemos nuestra historia planificada en la cabeza. Si somos una marca y queremos llamar la atención de las personas, deberemos planificar muy bien el concepto creativo que queremos contar.
No es lo mismo hacer un Spot que hacer Storytelling. Volvemos a la descripción de Storytelling, el proceso desde el cual construimos una idea que le debe dejar un mensaje al consumidor.
Hay Spots que son muy buenos Storytelling, pues es un material muy conciso de máximo 30 segundos y sí te dejan pensando.
El Storytelling lo utilizamos para “vender” pues no necesariamente la publicidad vende. Es decir cuándo hablamos del Storytelling para vender, debemos de dejar en la mente de la gente una pregunta, cómo lo han hecho los grandes en la historia…
Desde Gandhi o el mismo Jesucristo, grandes personajes que siempre contaban historias muy simples, qué te dejaban una pregunta que iba contra tus conductas diarias, que te llamaban la atención, que te generaban sorpresa y por último te desarrollan un conocimiento, este ejemplo nos muestra una conexión importantísima, para cuándo alguien intenta vender, si contamos historias, que no interactúan con el consumidor o tu usuario el problema qué vas a tener es qué ya existen 500.000 historias iguales o más…
Cuál es la que realmente no le deja tranquilo, pues tu historia le ha llegado o lo ha entusiasmado hacer otras cosas, es ahí donde viene el Storytelling que realmente ha sido bien definido y bien profundo.
Lo ideal es tener un concepto muy bien definido, un concepto que genere una “interacción”. Definiremos al Storytelling cómo el marketing de experiencias de hoy, vas a contar tu historia sin necesidad de mediar palabra, construirás tus territorios, construirás tus contextos en dónde la persona y su cerebro solos puedan ir armando pedacitos y lleguen a la propia conclusión de que tu historia es lo que realmente quieren.
Alguna vez hemos visto a marcas de refrescos hablar de ecología, educación, incluso deporte, sin decirte, recicla, estudia o haz deporte, te están diciendo, aporta, sé feliz o juega, nos cuentan siempre su misma historia de una manera qué no es la opinión del experto quién te lo dice, sino que te muestra cómo hacer un mundo mejor.
Actualmente el consumidor tiene toda la información a su alcance y al ser demasiado básico con un consumidor, puede llegar a sentirse ofendido.
Hay que decir en esta parte que el Storytelling no es contar una historia que vende, no explícitamente, es la publicidad dónde enganchas a tu consumidor para dejar al círculo totalmente cerrado. Damos la posibilidad al consumidor, usuario a experimentar y cerrar a través de sus propias experiencias ese fin o esa moraleja, qué la marca quiere transmitir y finalmente termina generando una venta.
Mientras más real sea nuestra historia, más se complementa con el entorno real de los consumidores, las historias van a ser más fácil de viralizarse, de compartirse y ganar seguidores - es decir ganar clientes.
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Tallenna
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