El diseño y el marketing han estado relacionados desde el principio de los tiempos, hoy en día, el diseño va más allá de la etapa visual, ya no solo es crear ilustraciones, conceptos, colores, tipografías, mensajes o logotipos.
“One more thing”, en palabras de Steve Jobs, significa dar un paso más allá, es decir, mientras que el marketing se centra en priorizar al cliente a través de una metodología Inbound para ayudar a cada persona o empresa a alcanzar sus objetivos, en diseño se plantea un método similar, con un enfoque profundamente humano, con la finalidad de ofrecer ideas emocionalmente significativas para los receptores basándose en la capacidad intuitiva para interpretar lo que se observa.
¿Qué es Design Thinking?
Design Thinking, aunque es una metodología de innovación en la actualidad, se creó desde los años 70’s y se basa principalmente en el usuario final y no en la tarea, mejor dicho, es un proceso en donde el diseñador tiene que ponerse en los zapatos del usuario, para conocerlo y poder resolver el problema al que se está enfrentando desde su perspectiva, empatizando completamente, de forma eficaz, creativa y sobre todo innovadora, generando un impacto positivo en la vida de estos usuarios.
¿Cómo ayuda al Inbound Marketing?
Ambas disciplinas se adaptan a la manera de pensar, investigación y compra de los clientes, definen diferentes escenarios, que conlleva conocer al público meta, identifica cuáles son las necesidades de las personas y ofrecen una solución con valor.
El diseño ayuda al marketing a generar lealtad en los clientes, mientras el Inbound ofrece un servicio extraordinario, Design Thinking brinda un servicio que tiene en cuenta los intereses de los clientes, generando atención al detalle, así cada producto o servicio deben ser creados centrados en el usuario.
Pasos para implementar Design Thinking
Los pasos que implementa el Design Thinking son cinco: empatía, análisis y definición del problema, generación de ideas, creación de prototipos y prueba. Te preguntarás ¿y esto cómo se compagina con metodología Inbound? Si recordamos el recorrido del comprador podemos observar los mismos pasos, el reconocimiento del problema, la solución y la decisión, incluso podemos ligarlo a los principios del Inbound (consistencia, personalización, optimización y adaptabilidad).
Esta relación puede observarse de forma evidente cuando Design Thinking es aplicado en UX/UI, es decir, en la experiencia del usuario.
Conclusión
Estas dos metodologías se complementan, si bien Design Thinking es un tipo de pensamiento que puede ser aplicado en cualquier área, el objetivo de ambas es ayudar a crear productos o servicios con una experiencia excepcional centrada en el usuario y los objetivos y necesidades de este.
En Digitalegia, somos expertos en brindar soluciones y experiencias extraordinarias para nuestros usuarios a través de la metodología Inbound Marketing, respaldada por Design Thinking.
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